El ante se encuentra en algunos de nuestros complementos. La reconocemos por su textura suave (en realidad es un cuero ligeramente raspado para tener este aspecto crudo) y su aire de los años 70.
¿Cómo mantener tus accesorios de ante?
La piel de ante, que se utiliza para algunos de nuestros accesorios, no resiste bien el contacto con el agua. Por lo tanto, debe ser impermeabilizado antes de usarse. Es aconsejable repetir la operación con regularidad: se aconseja primero cepillar suavemente el ante (con un cepillo suave o un cepillo de crepé) para eliminar el polvo, y luego aplicar el producto.
Si, a pesar de todas estas precauciones, el ante está mojado, déjalo secar al aire libre. No coloques el ante cerca de una fuente de calor o bajo la luz directa del sol.
En caso de mancha, puedes utilizar una crema especial para ante. Como es ligeramente abrasivo, el ante debe frotarse suavemente.
El ante tiene fama de sangrar, sobre todo después de los primeros usos. Por ello, te recomendamos que impermeabilices los accesorios antes de usarlos y que evites llevarlos sobre prendas de colores claros.